Salud visual: Evita molestias frente a las pantallas
Tal vez estés "teletrabajando" estos días o simplemente estás confinado en casa como la gran mayoría de españoles; sea como sea, párate un momento y piensa cuantas horas pasas al día delante de una pantalla. Seguro que son muchas, así que es muy posible que estés padeciendo ciertas molestias o puedas comenzar a sufrirlas: enrojecimiento de ojos, picor, lagrimeo, sensación de ojo seco, dificultad para mantener la tarea enfocada, dolor de cabeza...
Podríamos decir que la solución es dejar de usar las pantallas, pero probablemente esa no es una opción real; sí puede ser más factible intentar reducir el tiempo que pasamos frente a ellas y más aún poner en práctica unas sencillas normas de higiene visual:
- Cada 2 horas haz una pausa de 15 minutos; levántate y camina un poco, permite a tus ojos descansar de la tarea que están haciendo.
- Pon en práctica la regla 20/20/20: cada 20 minutos durante 20 segundos mira a algún objeto que se encuentre al menos a 20 pies (6 metros).
- Parpadea con regularidad para minimizar el picor o sequedad ocular. El parpadeo es un acto reflejo cuya frecuencia reducimos cuando estamos concentrados en una actividad; podemos poner en práctica un sencillo ejercicio varias veces al día que consiste en parpadear conscientemente cada 5 segundos durante 2 ó 3 minutos, lo que nos ayudará a reforzar el acto reflejo.
- En el caso de móviles y tablets coloca la pantalla a una distancia mínima de 30 cm. Diferentes estudios han demostrado que cuanto más pequeña es la pantalla más cerca la colocamos, obligando así a nuestro sistema visual a realizar un mayor esfuerzo.
- Coloca la pantalla ligeramente por debajo de la altura de los ojos; te ayudará a mantener una postura más natural y facilita el esfuerzo de convergencia que deben hacer nuestros ojos al mirar de cerca.
- Utiliza lágrima artificial para lubricar tus ojos, o un humidificador para evitar ambientes demasiado secos.
- Ajusta la resolución y contraste de la pantalla; a mayor nitidez de imagen menor esfuerzo para nuestros ojos.
- Reduce el brillo de la pantalla.
- Evita deslumbramientos y reflejos en las pantallas procedentes de otras fuentes de luz. No quiere decir que apagues las luces a tu alrededor, sino que evites que incidan directamente en la pantalla reflejándose directamente en tus ojos; de hecho, no debemos trabajar con pantallas en una habitación a oscuras.
Como ves son consejos relativamente sencillos de poner en práctica que van a mejorar mucho nuestro confort visual; no hay que esperar a que aparezcan las molestias para hacerlas frente, hay que poner los medios para evitar su aparición.