Producto: Antirreflejante en tus gafas

19.08.2021

Las lentes oftálmicas (las lentes de las gafas) son cada día más avanzadas, lo que permite mejorar el rendimiento y apariencia de tus gafas gracias a las diferentes geometrías de diseño y tratamientos que se le pueden aplicar.

Entre esos tratamientos se encuentra el antirreflejante, que como su nombre indica evita reflejos; pero no sólo eso.

El tratamiento antirreflejante -también conocido como tratamiento multicapa- está compuesto por un conjunto de capas ultrafinas situadas en la superficie de las lentes por deposición en alto vacío, de manera que se producen una serie de interferencias por las que se anulan las luces reflejadas y aumentando así la cantidad de luz transmitida.

Una lente con tratamiento antirreflejante tiene una transmisión de luz del 99%, frente al 90-92% de aquella lente que no lo lleva, siendo evidente el beneficio de las lentes con el tratamiento. El 1% de luz no transmitida produce un reflejo residual verde o azulado, según el fabricante, característico de estas lentes.

Además, a estos tratamientos multicapas se suelen asociar otras capas con propiedades interesantes para la lente final:

  1. Tratamiento endurecido: las lentes orgánicas son lentes con una superficie blanda, susceptible de arañarse con facilidad, así que este tratamiento le proporciona una mayor resistencia al rayado.
  2. Tratamiento antielectrostático: elimina la carga electrostática de la superficie de la lente, que atrae las partículas de polvo.
  3. Tratamiento hidrófobo: repele el agua, de forma que las gotas de lluvia no se adhieren a la superficie con tanta facilidad (no desaparecen totalmente).
  4. Tratamiento repelente de la suciedad: facilita la limpieza de la superficie de las lentes.

Con todo lo visto hasta el momento, es evidente que llevar en nuestras gafas lentes con tratamiento antirreflejante nos aporta una serie de beneficios, siendo los principales:

  1. Son lentes más transparentes (99% de transmisión de la luz frente al 90-92%) y por tanto más estéticas tanto desde el punto de vista del que mira a través de ellas como de las personas que nos ven con las gafas puestas.
  2. Mejoran el contraste.
  3. Disminuyen la fatiga visual (picor, escozor, ojos rojos).
  4. Mejoran la visión nocturna al disminuir los reflejos de luces artificiales.

Por todo ello deberíamos usar siempre lentes con antirreflejante, pero sobre todo están especialmente indicadas en los siguientes casos:

  1. Uso de pantallas: televisión, ordenador, tablet, smartphone...
  2. En conducción nocturna, pues al eliminar reflejos mejora nuestra visión y por tanto nuestra seguridad.
  3. Cuanto mayor es el índice de refracción de las lentes, esto es, cuanto mayor es la reducción de espesor, mayor es la cantidad de luz reflejada por la superficie, y por tanto más indicado es el uso del antirreflejante.
  4. En lentes progresivas también está especialmente indicado, pues eliminan mayor cantidad de imágenes parásitas que pueden aparecer en ellas.

En cuanto a los inconvenientes podemos encontrar:

  1. Se nota más la suciedad, pues al ser más transparente la superficie somos más conscientes de ella. Esto está mejorando con los nuevos tratamientos disponibles.
  2. El precio es un poco más elevado.